Capcom habilitó durante el pasado domingo una nueva demo de Resident Evil 8: Village, exclusiva para los usuarios de PS5 y PS4. Durante media hora pudimos explorar diversos rincones, algunos ya conocidos, del castillo Dimitrescu.
Tras la anterior demo, en la que conocíamos la aldea, en esta ocasión ha tocado volver al misterioso castillo Dimitrescu. Y decimos volver, ya que en la demo “Maiden” que tenemos disponible en PS5 desde enero, tuvimos la oportunidad de “pasear” por algunas de sus mazmorras y habitaciones. A diferencia de aquella, que nos ponía en la piel de una doncella que despertaba en las mazmorras del castillo, en este caso tomamos el control del Ethan Winters, nuestro protagonista, en su desesperada búsqueda por encontrar a su hija Rose.
Sin pretender hacer spoilers, tanto para aquellos que no quieren jugar a la demo a la espera de la salida oficial del juego el 7 de mayo, como para los que aún no han podido disfrutar de ella al no disponer de la consola de Sony, podemos intuir que el juego estará plagado de puzzles, puertas cerradas sobre las que interactuar con objetos clave, bastantes enemigos y, al menos en la demo, muy pocas balas.
También hemos podido conocer al mercader que nos permitirá mejorar nuestras armas, comprar munición y objetos varios, similar a lo que ya pudimos ver en Resident Evil 4.
CONCLUSIONES
La sensación general de esta demo “castillo” es que se queda bastante corta en comparación con la anterior de “aldea”. El contenido total se puede completar en poco más de 15 minutos. Muchas de las habitaciones están cerradas y los puzzles que se plantean no ofrecen la posibilidad de ser resueltos. Al contrario que en la aldea, donde los 30 minutos de límite de juego parecieron escasos, el castillo se puede completar dos veces sin demasiado problema.
Solo recordar que esta demo y la demo de la aldea volverán a estar disponibles del 2 al 10 de mayo. Esta vez, junto con PS4 y PS5, se podrán descargar en las consolas de XBOX y Steam. La duración máxima de juego será de 60 minutos, acabemos o no el contenido.